No importa lo que diga mi prima; no soy la reina de las relaciones imposibles. Quiero decir, sólo porque mi último novio trató de matarme y me dejó una pequeña cicatriz en el cuello, entonces me obligó a mudarme al otro lado del país y cambiar legalmente mi nombre a Reese Randall para escapar de él, no significa que...
Oh, ¿a quién estoy engañando? Para una estudiante de primer año en la universidad, tengo que tener el peor historial de citas.
No es de extrañar que el amor sea lo último en mi mente cuando Mason Lowe entra en mi vida. Pero la química entre nosotros es como ¡bam! Nuestra conexión desafía la lógica. Y él es tan malditamente sexy. Estar cerca de él me hace sentir más viva de lo que nunca me he sentido. Incluso me gusta pelear con él. Podría ser mi alma gemela... excepto por un pequeñito problema.
Es un gigoló.
Dios, sí que sé cómo elegirlos.
8,5. Leélo te encantará.
El libro es fantástico. Solo empezarlo quieres saber que va a pasar más adelante.
La historia empieza con un epílogo. Nos cuenta porque Mason es gigoló.
La verdad es bastante obvio. Pero hay que ser muy valiente para meterse en esa vida.
Así que por culpa de la vida que lleva, casi no tiene relación con nadie. Y cuando digo nadie, no solo es con chicas, sino que tampoco hay amigos en los que pueda confiar. Hasta que...clarísimamente conoce a Reese.
Reese es la protagonista de este libro. Como bien dice la sinopsis Reese también ha tenido una vida difícil. Y ahora se tiene que mudar de ciudad por su obsesivo ex-novio. Pero no hay mal que por bien no venga. En ese nuevo pueblo conocerá a un sexy gigoló que la volverá loca. Pero, loca, loca, loca...La Autora se ha pasado un poco con la obsesión de Reese por Mason. Podría decir que es lo único que no me ha gustado nada de nada del libro.
Uhm, sí. Eso no iba a pasar. Estallaría internamente de una sobredosis de hormonas si me acercaba demasiado a Sexy ahora mismo. Era como acercarme demasiado al sol; probablemente me quemaría con uno de sus mortíferos rayos cargados de testosterona. Y no llevaba suficiente protector solar para ese tipo de acción.
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Por un lado me hace gracia, muchísima.
Pero por otro es ridículo.
Continuaba sujetando la toalla en su lugar mientras se agachaba a levantar un par de pantalones color caqui tirados en el piso. Pero mientras se movía, la toalla se deslizó hacia su espalda, y juro que pude echarle un vistazo a la raya de su culo.
Oh, cómo podría volverme adicta a las rayas, especialmente cuando esos dos firmes y bronceados globos abrazaban esa bendita raya, moldeada tan perfectamente a la parte posterior de su toalla. Eran como montículos gemelos de éxtasis.
El libro es genial. La prima de Reese parece una niña tonta, pero en realidad es fantástica. Y no me puedo olvidar de la familia de Mason, adoro a su madre y más aún a su hermana.
Para mi no es solo un libro con una historia de amor. Sinó también una de superación. No todo en la vida es fácil, pero con un poco de paciencia y trabajo todo se consigue. Incluso la felicidad.
—¿Mason? —dije lentamente, mi voz tímida—. ¿Qué estás haciendo?
—Algo que probablemente no debería. —Su voz sonaba ronca y tierna mientras hundía su cara y presionaba su frente contra la mía.
Empecé a temblar. No sé si fue a causa de la anticipación, la absoluta excitación, temor o miedo absoluto.
—Si... si no debes, entonces... no lo hagas.
El libro es 100% recomendable. Es entretenido, divertido, y con suspense. El único problema como ya he dicho es la obsesión por lo guapo que es Mason. Muchas veces te ríes de las tonterías que dice Reese, pero otras se te hace taaaan pesado. Pero quitando todo eso es fantástico.
Mira, tu risa es exactamente lo que me mantiene alejado, mujer. Sólo quiero besar esos labios y atesorar ese sonido todo para mí.
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